domingo, 15 de marzo de 2009

La vida de Moses (el ángel caído) cap. 2


Después de caminar durante horas, estaba agotado y todavía más desorientado que cuando empezó su búsqueda, se habría subido al el dichoso bus, pero desde ahí arriba lo habían mandado con lo puesto, la ropa, -entiéndase para no desentonar- y se habían olvidado de lo más importante, el dinero, en el mundo de los humanos no importa nada más que eso...

De repente algo raro sucedió, de su barriga provenía un sonido atroz, algo que nunca antes había oído, tenía una sensación extraña, y sintió por primera vez la sensación de hambre...temía que si no se apresuraba a encontrar al pequeño Benjamín, el sonido se volviera más fuerte y esa sensación de hambre se lo acabara tragando, alguna vez había visto a los humanos entrar Allí Arriba por falta de comida, y aunque pensó que esa sería una manera de regresar, sabía que Él encontraría el modo de mandarlo de vuelta a la tierra, así que apresuro el paso y pronto llegó a un parque donde encontró a algunos humanos compartiendo lo que parecía ser alimento, y sin dudarlo se acercó, tenía que aplacar la sensación de hambre porque se estaba quedando sin fuerzas.
Cuando llegó a la par de los vagabundos del parque les explicó su historia, que era un ángel en una misión, y que lo habían mandado a la tierra sin nada más que la ropa que llevaba puesta y necesitaba comer algo porque debía encontrara al niño que lo haría volver Allí Arriba.
Después de su fantástico relato vió como los humanos del parque empezaron a reír a carcajadas...
Pero uno de aquellos hombres se apiadó de él, pensando que era un pobre loco que solo venía en busca de alimento, y compartió con él su parte. Moses sorprendido de su generosidad le dijo que le pidiese un deseo y que cuando volviera Allí Arriba intercedería por él para que se lo concediesen. A lo que aquel hombre algo aturdido, le contestó que lo que más deseaba era volver a ver a su esposa, Moses le dijo que si su esposa estaba Allí Arriba él no podía hacer nada, que en todo caso le mandaría saludos si la veía alguna vez.
El hombre le explicó que su mujer seguía viva y vivía con los hijos que habían tenido, dos varones y una preciosa niña, pero que ella lo había abandonado por su problema con el juego, había sido incapaz de controlarlo y por eso la había perdido a ella y a sus hijos, y que haría lo que fuera por recuperarla.
En ese momento Moses comenzó a entender la calidez humana, y todas esas cosas de las que Él le había hablado....

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