Querida Mamá Walsh.....por Marian Keyes

Querida Mamá Walsh, tengo un problema, el otro día estaba viendo la televisión con mi novio, cuando de repente me mira y me pregunta: ¿has engordado? ¿tú has engordado, verdad?, a lo que yo respondí que si,(obviamente había pasado de una 12 a una 16),creo que un poco...y noté como el se fijaba en mi prominente barriga, a lo que yo pregunte: ¿pero tu me quieres igual?, y él contestó: si claro que te quiero igual.... y mi réplica: bueno pues entonces no hay ningún problema no?, y él repondió: no, pero me gustabas más cuando estabas delgada...

relato del libro <> de la autora Marian Keyes

Hoy iba tan tranquila en mi medio de transporte habitual y como me paso horas muertas en el o bien me llevo el net book y añado entradas a mi blog, o dicho sea de paso escribo alguna columna de última hora, o bien me llevó un libro, y así se me pasa el trayecto más rápido...Pero a lo que iba, hoy he leído este relato del libro que cito más arriba, y me he quedado alucinada, evidentemente no es una copia exacta de lo que pone en el libro, porque no quiero cometer ilegalidades, pero se le acerca bastante,y el caso es que si miramos el transfondo de la cuestión de la que trata el relato, es que es tan indignante!!!! ¿cómo un hombre que lleva tiempo con su pareja de repente le dice semenjante aberridad?, que si ha engordado??!! pues claro, las mujeres,y esto va para los hombres, las mujeres tienen infinitos cambios hormonales, para su desgracia, porque sin ellos no hubiesémos traído al mundo a hombres tan "sensibles al cambio físico de sus parejas", y eso puede provocar a veces que la grasa se asiente en lugares de la que luego es imposible quitarla....claro que esto no justifica los atracones de fin de semana, o el vaciado de nevera a las doce de la noche...entiéndase no soy abogada de pleitos pobres, así que no nos voy a justificar a todas las que en algún momento nos hemos pegado el atracón del verano, las navidades o esas típicas fechas a las que irremediablemente les sigue un atracón de gym, aérobic o sucedáneos, por eso y porque no quiero pecar de feminista...
Pero la cuestión es que hoy me he preguntado si las mujeres tenemos doble rasero, me explico, cuando conocemos a un hombre que nos atrae exageradamente, antes de una cita con el susodicho la mayoría nos pasamos horas decidiendo que nos vamos a poner, incluso vamos pensando en ello de camino al trabajo, pero por Dios!! Y si por casualidad queda alguna zapatería, tienda de cosméticos o cualquiera de esos reinos capaces de acentuar la bellaza femenina o en su lugar (estáreis de acuerdo muchas) de disimular los defectos, -¿¿quien no ha corrido a la farmacia o a la perfumería a por el corrector de granos antes de una cita importante??- entramos en ellos como si la vida nos fuera en encontrar el mejor par de taconazos, que segurmente no volveremos a usar si la cosas con el citado hombre van pa´lante, y es más, a menudo solemos disfrazarnos, si, si chicas, disfrazarnos de tal modo que ni hasta nuestra mejor amiga que nos conoce muy bien, podría reconocer a esa tigresa que sale por la puerta en dirección a una cita fabulosa con un hombre del todo apuesto....

Claro!! creo sinceramente que ahí mismo reside el fallo, si nos presentasemos en la cita con nuestra mejor cara lavada, y nuestro aspecto habitual, probablemente no sorprenderíamos a nuestra cita, pero al menos tampoco se sorprendería si tres años depués ya no queda nada de la explosiva rubia, morena...., según el caso de cada cuál, salvo una incipiente barriga, embutida en un horible pantalón flojo de andar por casa, porque por muy fashion que nos lo pinten a quien narices le queda bien la ropa de andar por casa si precisamente esta hecha para eso, para andar por casa y cuya primerísima máxima es que no debe parecerse lo más mínimo a nuestra estupenda ropa de trabajo o de salir....simplemente ha de ser cómoda y nada sexy...
Entonces, ¿el problema está eque las mujeres cuando llevamos tiempo con un hombre, dejamos de vernos sexis, porque se supone que después de un año saliendo juntos o peor aún vivendo bajo el mismo techo, sabemos que tendremos sexo igualmente?

Porque sinceramente, creo que el hecho de cuidarnos con tantísimos productos e ir siempre impecablemente monas, se reduce al hecho de cazar una buena....a un buen hombre que nos "mantenga" siempre felices y contentas, sin importarle nuestros kilos de más, porque incluso ellos,sin aparentemente prestar tanto ojo a su fisionomía, saben que en algún momento dejará de serles rentable para cazar, digo ligar! y que es mejor una mujer entrada en carnes y con ropa de andar por casa que estar solo el resto de su vida compadeciéndose de porque dejaron escapar a aquella mujer tan estupenda que había engordado dos tallas, cuando ahora podrían estar tan tranquilos viendo su programa favorito, y quizás con suerte después del rato televisivo tener un poco de sexo con una mujer de la talla dieciséis